La panna cotta, es un postre elaborado a partir de crema de leche, azúcar y gelatina o agar agar. Es muy típica de la región del Piamonte, donde había mucho excedente de leche y para aprovecharla se creó esta delicia.
Normalmente la panna cotta es una receta dulce, que se acompaña de mermeladas o frutas, pero os aseguro que esta versión salada, la panna cotta de salmón, es fantástica. La combinación de ingredientes; el toque fresco de la albahaca, mezclado con la untuosidad de la nata y el salmón, hacen de este plato una receta perfecta para grandes ocasiones. El punto de cremosidad viene dado por la nata, clave en la elaboración, por eso he elegido la Nata Cocina Président, una nata de primera calidad, que le da le un sabor y textura muy especial y deja una agradable y deliciosa sensación en boca.
Es una receta que no necesita de mucha práctica en la cocina más bien se podría decir que aunque nunca hayas cocinado es perfecta para iniciarte en los fogones. Lo único que debes tener en cuenta es que necesitas un tiempo para que cuaje, aparte de eso sólo te harán falta ganas de asombrar a tus comensales.
Este plato se sirve frío en moldes individuales, de esta manera cuajará mejor. Se puede presentar en vasitos. Para darle un toque sofisticado estas fiestas preséntalo en copas, quedarán ideales y vestirán tu mesa.
Ingredientes:
- 500ml de Nata Cocina Président
- 100ml de leche
- 200gr. de salmón ahumado
- 7 hojas de gelatina
- Albahaca fresca
- 80gr. de gorgonzola
- Sal
- Pimienta
Elaboración de la receta:
- Hidratar la gelatina en agua muy fría.
- Poner en un cazo la nata junto a la leche y unas pocas hojas de albahaca. Dejamos cocer a fuego medio alto hasta que comience a hervir. Vamos removiendo de vez en cuando.
- Mientras tanto picamos finamente el salmón.
- Sacamos las hojas de albahaca una vez que haya hervido y agregamos el salmón picado, la sal y la pimienta molida, removemos.
- Escurrimos la gelatina bien y se la incorporamos a la mezcla de la nata.
- Ponemos a fuego bajo y removemos hasta que la gelatina esté bien disuelta.
- Vertimos la mezcla a en los recipientes en los que lo vayamos a servir y los metemos en el frigorífico hasta que cuaje. Mínimo 3-4 horas, si veis que necesita más tiempo, dejadlo un poquito más.
- Para servir ponemos un poco de salmón ahumado, unas hojitas de albahaca frescas y huevas de lumpo encima.